Tipos de materiales de llantas

November 23, 2018

¿Alguna vez te has preguntado de qué material están hechas las llantas? Pueden ser de aluminio, acero, fibra de carbono, magnesio y de aleación por ejemplo.

Las llantas se fabrican con diferentes materiales no solo por el coste, sino también por funcionalidad. Cada tipo de llantas tiene diferentes aplicaciones. No se puede decir que un material es cien por ciento mejor que otro, ya que todo depende del uso que se le dé al coche y del tipo de terreno por el cual transita. El material influye, sobre todo, en el peso del vehículo y en el precio final.

Materiales de las llantas

Lo usual es que el coche venga de fábrica con llantas de aluminio y, en menor medida, de acero. Ambas tienen diseños estándar y representan menores costos. Por su parte, las de magnesio, de aleación o de fibra de carbono se reservan para los vehículos más exclusivos, pero no necesariamente son las mejores fuera del ámbito del lujo. Vamos a ver uno a uno, qué materiales son utilizados en la fabricación de las llantas y para cuáles son las cualidades de cada uno.

Aluminio

Es el tipo de llantas más común y por eso están presentes en la mayoría de automóviles. Su mayor virtud es el equilibrio entre resistencia y bajo peso. Al no ser un material tan duro como el acero, tiene mayor riesgo de agrietarse. Sin embargo, las de aluminio pueden repararse cuando reciben golpes leves. El aluminio es un material que contribuye a disipar el calor por lo cual aporta un plus de seguridad a la frenada.

Otra de sus ventajas es el bajo costo. Hay que tener precauciones porque en el mercado se venden llantas de aluminio que son vaciadas artesanalmente. Es importante asegurarse de que se hayan fabricado en un lugar confiable, por el método de inyección, y que hayan superado pruebas de rayos X. De lo contrario podrían dar lugar a riesgos innecesarios.

De aleación

Las aleaciones más comunes son las que se hacen entre aluminio y otros materiales, como el magnesio. Sin embargo, también se emplean las aleaciones de acero. En términos de calidad, son mucho mejores las primeras. Las llantas de aleacion son muy ligeras y esto hace que se pueda conducir el coche con mayor sensibilidad. Estas utilidades se perciben especialmente durante el frenado en las esquinas.

Como tienen buena disipación del calor, los frenos tienden a fallar menos que con otros materiales. Se encuentran generalmente en los autos de gama media y alta, debido a que su costo de producción es elevado. Es un factor importante ya que reemplazarlas resulta oneroso. Y no se debe olvidar que son proclives a la corrosión galvánica.

Fibra de carbono

Son las más avanzadas hasta el momento. Además de que son muy bonitas, también cuentan con una ligereza muy superior a la de las demás llantas que hay en el mercado. No podía ser de otro modo, ya que la fibra de carbono precisamente aporta eso: mínimo peso, alta resistencia y máxima rigidez. Este tipo de llantas mejoran el rendimiento del coche en la aceleración y la frenada.

También proporcionan mucho más confort durante la marcha, ya que amortiguan notablemente las vibraciones. Las llantas de carbono incrementan la capacidad de la suspensión y con ello mejora significativamente el control de la tracción y de la dirección. La sensación final es que el automóvil es más maniobrable. Por supuesto, los costos no son para nada bajos.

Acero

Las llantas de acero eran las más populares hasta hace apenas unas cuantas décadas. Sin embargo, actualmente su uso ha disminuido notoriamente. Su principal atributo es la resistencia. Esto las hace ideales para los automóviles que deben cargar peso. Otra de sus ventajas es que se fabrican en acero maleable. Esto quiere decir que si sufren un golpe, se doblan en lugar de quebrarse. Por eso pueden repararse con relativa facilidad.

Además, son las más baratas de todas. Por contrapartida, su peso llega a ser un inconveniente. Las de acero son estéticamente más atractivas que otras. Así mismo, brindan mucha seguridad ya que el acero es un material que absorbe impactos de mediana intensidad sin deformarse. También proporcionan una rotación suave y alojan el neumático sin propiciar fugas de aire.

Magnesio

Las llantas de magnesio son muy similares a las de aluminio, pero tienen menos peso. No son las más comunes por su alto costo, ya que tienen una resistencia mayor que las de acero. En otras palabras, son las más ligeras y las más resistentes al mismo tiempo, de ahí sus altos precios. También son más duras y por eso no se doblan con facilidad. El uso de estas llantas es principalmente deportivo.

En la mayoría de competencias de automóviles este es el material más usado. En cambio, no son muy prácticas para caminos rurales o carreteras difíciles, ya que tienden a oxidarse con facilidad. Otra de sus ventajas es que son más eficientes para disipar el calor. Esto hace que la frenada sea mucho más segura. Gracias a su bajo peso, el automóvil consigue mucho mayor rendimiento en la aceleración. Finalmente, este tipo de llantas reduce el trabajo de los amortiguadores.

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